Los ejercicios para fortalecer las piernas no solo son necesarios, sino que también son muy divertidos. ¡Y los resultados ni se diga! No hay mejor sensación que cuando después de mucho meses de hacer ejercicio, te ves al espejo y ves cómo la forma de tu cuerpo va cambiando, se va tonificando y vas consiguiendo tus metas. O bueno, sí, hay una sensación más bonita que ésa: Cómo te sientes cuando alcanzas tus metas.
Así es, hacer ejercicio, te hará sentir más fuerte, te hará mucho más feliz y más equilibrada emocional y mentalmente. Por todo esto, si quieres fortalecer tus piernas, aquí te dejamos cinco ejercicios para que los incluyas en tu rutina de ejercicios.
1- Saltos de tijera o Jumping Jacks
Para realizar los saltos de tijera, vas a necesitar ejercitar y mover todo tu cuerpo. Por lo cual, es un ejercicio muy completo. Debes empezar con las piernas juntas y luego, dar un salto de manera que abras las piernas y eleves los brazos con las palmas hacia el exterior. Después, con el segundo salto, volverás a la posición inicial con las piernas juntas. Realiza este ejercicio por 30 segundos o durante un minuto, dependiendo de la resistencia que vayas adquiriendo.
2– Elevación de talones
Este ejercicio te va a permitir fortalecer la zona de tus gemelos y la parte posterior de tus muslos. Para hacerlo debes tener las piernas al nivel de los hombros para después elevar los talones del suelo De esta manera, estarás sosteniendo tu peso en las puntas de tus pies y procura sostener esta posición por 20 o 30 segundos.
Con este ejercicio sentirás el ardor en tus gemelos, pero también te ayudará a tonificar la parte interior de tus muslos. Puedes acompañar este ejercicio con mancuernas para aumentar el peso. Incluso es una posibilidad hacer tres sets de 20 o 30 segundos.
3- Elevación de abductores
Este ejercicio te ayudará a tonificar la parte interna de tus piernas, que es el lugar del tren inferior donde se suele acumular más grasa y, por ende, puede presentar más flacidez. Para trabajar esa parte, sobre tu tapete de yoga, acuéstate de lado y apóyate en tu antebrazo y pierna.
Después, eleva la pierna y vuelve a la posición inicial. Si tienes una banda de resistencia, ubícala en tus tobillos. Esta herramienta será perfecta para subir el nivel de dificultad del ejercicio, lo que te obligará a hacer más fuerza para subir la pierna.
4- Zanzadas laterales
Para hacer este ejercicio, primero necesitas colocar tu cuerpo en una posición correcta. Por ello, debes poner tu espalda derecha, abrir las piernas y al bajar te sugerimos que tu rodilla flexionada no sobrepase la punta de tu pie. Su proceso es sencillo. Inicialmente, tu cuerpo estará en forma de una estrella de mar, con esto nos referimos a que tus brazos deben estar extendidos a los laterales y tus piernas abiertas un poco más de lo habitual.
Luego de ello, empieza a blancear tu peso hacia una de tus rodillas, y finalmente, sube a la posición inicial. Este movimiento lo harás alternando tus rodillas por un lapso de un minuto o si lo prefieres 30 segundos. Existen varios aspectos que pueden afectar el desarrollo de este ejercicio, el más común es no estirar los músculos que trabajaste, lo cual puede generar calambres. Así que ya, sabes cómo evitar este dolor profundo, y tampoco intentes hacer sentadillas muy profundas o con pesas que afecten tu rendimiento.
5- Zancadas frontales
Los pasos a seguir para realizar este ejercicio son: Primero, estira una de tus piernas hacia el frente y baja formando una “L” con la pierna que avanza hacia adelante. Mientras que con la otra vas a realizar un movimiento parecido a arrodillarte sin tocar el suelo. Este ejercicio lo puedes hacer intercalando las piernas o realizando un ciclo con una pierna y posteriormente con la otra.
Recalcamos que, es un ejercicio que te brinda opciones como bajar y mantener la posicicón por unos segundos, ser constante con la posición o hacer cortitos cuando tienes ambas piernas con ángulo de 90 grados.