El cobrizo es un tinte pelirrojo atrevido, brillante y bonito. También es un compromiso: Para conseguir un tono cobrizo intenso, tendrás que ir a la peluquería cada seis semanas aproximadamente. Pero si te animas, este tono te hará destacar entre la multitud en todos los sentidos. Si quieres probar el cobrizo pero no estás segura de si es adecuado para tu estilo o tu tono de piel, sigue leyendo para obtener consejos sobre cómo lucir este look con confianza.
El pelo cobrizo es una forma estupenda de destacar.
Si buscas una forma de destacar entre la multitud, el pelo cobrizo es una gran opción. Es único y llamativo sin ser demasiado obvio o exagerado.
Tienes que comprometerte a largo plazo con el color, o acabarás con un cabello rojo anaranjado.
El cabello cobrizo es un compromiso a largo plazo. Si lo que buscas es un tinte temporal, el cobrizo no es tu tono. Tienes que asegurarte de que tu pelo ha sido aclarado previamente con decolorante o tónico antes de aplicar el tinte; si no, saldrá rojo anaranjado en lugar de verdaderos tonos cobrizos. Ten en cuenta también que una vez que te hayas aplicado este tinte y decidas que es hora de algo diferente (lo que puede ocurrir rápidamente si eres como yo), volver a tu color natural requerirá decolorar todos esos rojos y dorados intensos para revelar tu tono natural subyacente.
Los mejores tonos de cobre complementan los tonos de piel cálidos y los ojos azules.
El cabello cobrizo queda mejor en personas con tonos de piel cálidos, como el oliva y el moreno. También queda muy bien a las personas de ojos azules. El contraste entre los dos colores es sorprendente y es un look que la mayoría de la gente puede llevar sin parecer que se esfuerza demasiado.
El cobrizo no queda bien con los ojos verdes: choca con el verde del iris y te hace parecer cansado o enfermizo. Del mismo modo, el cabello cobrizo tampoco queda bien con los ojos marrones porque no hay suficiente contraste entre ambos colores para que resulte favorecedor; en lugar de hacer que tu rostro destaque bajo tus mechones (que es lo que queremos), esta combinación opaca ambos colores para que se mezclen en un tono marrón-rojizo poco inspirador que no destaca en absoluto.
Si quieres probar el rojo pero no estás segura de si es para ti, busca un tono de rojo que combine con tu color de pelo natural.
Si quieres probar el rojo pero no estás segura de si es para ti, busca un tono de rojo que combine con tu color natural de pelo. Si eres rubia natural, prueba con un tono cobrizo claro o rubio fresa. Si eres morena, opta por un tono cobrizo oscuro o caoba. De esta forma, el color no será demasiado drástico y combinará bien con tu tez, haciendo que la transición del castaño al rojo sea más fácil tanto para los ojos como para el cerebro.
Si quieres probar el rojo pero no estás segura de si es para ti, busca un tono de rojo que combine con tu color natural de pelo. Si eres rubia natural, prueba con un tono cobrizo claro o rubio fresa. Si eres morena, opta por un tono cobrizo oscuro o caoba. De esta forma, el color no será demasiado drástico y combinará bien con tu tez, haciendo que la transición del castaño al rojo sea más fácil tanto para los ojos como para el cerebro.
No tengas miedo de experimentar con diferentes tonos de rojo, desde el rubio fresa hasta el burdeos intenso.
Si te preguntas cómo llevar el pelo cobrizo, la respuesta es sencilla: no hay reglas. Pero si buscas inspiración, ¡la tenemos! El cobrizo es uno de esos colores que pueden combinarse con cualquier estilo, y nos referimos a cualquier estilo. Tanto si tu estilo es atrevido como clásico o intermedio, hay un tono de rojo que se adaptará perfectamente a tus necesidades.
El cobrizo no es sólo un tono de rojo; tiene muchas variaciones y matices que pueden ir desde el rubio fresa al burdeos intenso (y todo lo que hay entre medias). Lo mismo ocurre con los rubios: hay muchas formas diferentes de conseguir este look dependiendo de lo claros u oscuros que quieras que sean tus mechones. Si te gustan más los castaños, no te preocupes porque también hay muchos disponibles. Por último, el negro es otra opción si ninguna de las anteriores se ajusta a lo que buscas, pero aún así quieres algo atrevido y dramático sin que resulte demasiado duro para los ojos a primera vista”.
El cobrizo es una opción atrevida que merece la pena probar.
El cobre es una opción atrevida, pero merece la pena probarla. Si te sientes aventurera, prueba diferentes tonos de rojo en tonos cobrizos. Puedes ir de un cobrizo claro a un burdeos oscuro o incluso negro si quieres llevar tu look al siguiente nivel.
Si estás buscando una forma de destacar entre la multitud y hacer una declaración de intenciones con tu color de pelo esta temporada, el cobre puede ser justo lo que te ha recetado el médico. Sólo tienes que asegurarte de que tienes suficiente confianza en ti misma y de que sabes lo que cuesta mantener un tono tan intenso antes de comprometerte a largo plazo (el cobrizo requiere retoques frecuentes).