Halloween es una de las fechas las fechas más celebradas en Estados Unidos y, como no, los famosos aprovechan para sacar su instinto más spooky y lograr decoraciones alucinantes y super tenebrosas. En este caso hablaremos de la casa de Kim Kardashian. Ella sin duda, demuestra cada año que es una fanática de esta celebración junto con sus hijos. Arañas, calaveras, zombies y demás cosas aterradoras son solo algunas decoraciones que la empresaria ha utilizado para sorprender a sus vecinos y a quienes la visitan.
Kim realizó un tour en el cual dio a conocer el espeluznante cementerio al que dio vida en la parte delantera de su casa. Y es que si el ambiente de un campo santo ya da miedo, imaginate sumarle muertos vivientes, ¿impresionante, no? Pues así fue como la esposa de Kayne West aterrorizó a sus vecinos y a quienes la visitaron.
El video fue publicado hace 5 días como un reel en su Instagram y dejó con la boca abierta a muchos.
No hay duda de que Kim es una verdadera amante del Halloween. En 2020 ella y su familia manifestaron su amor por las arañas disfrazándose de las mismas y el año pasado, la empresaria quisó llevar su amor por estos insectos a otro nivel. Por este motivo, colocó una araña gigante hiperrealista, de aproximadamente seís metros de altura, saliendo de unos arbustos.
Pero… ¿ninguna araña es más aterradora que un cementerio con muertos vivientes, cierto? Nosotros creemos que no. Por ello, la empresaria ambientó su cementerio con la decoración de múltiples cadáveres que simulaban escapar de sus tumbas. A plena vista se apreciaban las manos de los esqueletos intentando salir de la tierra. Un punto a destacar es que esas manos huesudas que la famosa utilizó para aterrorizar su casa fueron moldeadas por sus hijos, sus amigos y por ella misma. Al parecer se prepararon muy bien para la temporada de las calabazas.
Asimismo, se pudo apreciar una gran cantidad de esqueletos postrados en los árboles. Y presta atención porque las calaveras en los marcos de las puertas, las telarañas colgando por los pasillos y los monjes encapuchados alrededor de una hoguera tampoco faltaron.
Y como no hay susto sin gritos ni llamados del más allá, la estrella no dudó en acompañar toda su decoración con música de terror y algunos sonidos, donde se escuchaban voces de ultratumba y llantos. ¿Quién no hubiera deseado estar invitado a pasar Halloween en su mansión?
La historia del Halloween:
Resulta que esta tradición viene de la abreviación: All Hallows´ Eve”, que significa: La víspera de todos los santos. A pesar de ser un festejo tan popular en Norteamérica, la realidad es que es de origen celta. Así es, hace más de 3.000 años los irlandeses celebraban el Halloween en otoño, donde la temporada de cosechas terminaba, dando la apertura al nuevo año celta con el solsticio otoñal.
En esa época se creía que en la noche del 31 de octubre el mundo de los muertos y el de los vivos se conectaban para crear un canal de espíritus tanto buenos como malos. Desde entonces, empezaron a inventarse muchas tradiciones como llevar máscaras, armar calabazas con velas y usar espantapájaros. Todo esto con la intención de protegerse de los espíritus no deseados.
Actualmente es celebrado en casi todo el mundo pero los países que más adoptaron esta tradición fueron : Canadá, Irlanda, Estados Unidos y el Reino Unido.
El famoso Truco o Trato o Dulce o Travesura
El Halloween es sin duda parte de la cultura norteamericana. Ese día los niños se disfrazan y salen a pedir dulces pasando de casa en casa con la frase: “Truco o trato”. Por este motivo, en Estados Unidos las personas se esmeran tanto para que sus hogares queden muy tenebrosos e incluso algunos hacen recorridos con juegos para que los niños se diviertan. Por su parte, los jóvenes y adultos salen a fiestas de disfraces o, simplemente, elaboran sus propias calabazas, aprovechando la pulpa de las mismas para hacer un sinfín de recetas.
Sin duda alguna, esta tradición celta ha sido acogida a nivel global y existen varios fanáticos que no esperan ni un segundo para vivir la noche de todos los santos como se debe. Un claro ejemplo es la socialité Kim Kardashian y sus hijos, quienes han demostrado una vez más ser unos adictos a la temporada del terror.