Si te gustan los postres sencillos, no te puedes perder esta receta sin horno ni grenetina. Se trata de un cheesecake que incluye mazapán y es muy fácil de preparar, pues solo deberás mezclar los ingredientes y llevar al refrigerador.
Aunque existen muchas variaciones del mazapán, es esta ocasión usaremos uno de los más populares, en especial en México, que es a base de azúcar, maní o cacahuate, dándole un toque muy especial a nuestro postre casero.
Receta de cheesecake sin horno ni grenetina
¿Sabías que el cheesecake, pastel o tarta de queso es de los postres más populares en el mundo? En la actualidad encontrarás miles de formas para prepararlo, pero queremos que puedas disfrutarlo sin tantas complicaciones, por eso te presentamos esta maravillosa receta. Necesitarás 8 ingredientes, además del molde y papel para hornear.
Lo primero que deberás hacer es preparar la base de galleta, después la masa con productos como el queso crema, la crema de cacahuate y por supuesto, el mazapán. Aquí te contamos a detalle cuáles serían productos a reunir.
- 1 paquete de galletas sabor a vainilla.
- 1 barra de mantequilla sin sal (90 g).
- 2 barras de queso crema (190 g cada uno).
- 1 cucharada de crema de cacahuate.
- 1/2 taza de azúcar regular.
- 1 lata de media crema (225 g).
- 1/2 cucharadita de extracto o esencia de vainilla.
- 6-8 mazapanes, por ejemplo, la marca de la Rosa.
- (Para mazapanes caseros: misma cantidad de azúcar glass y cacahuate tostado).
Por último
- Papel mantequilla o papel para hornear.
- Molde desmontable.
- Un tazón y batidor eléctrico.
Preparación
A continuación, te contamos el paso a paso para que puedas lucirte con un postre diferente, pero sin tener que invertir mucho tiempo y esfuerzo. Su sabor, consistencia y presentación permiten que sea una buena opción para compartir con tus amigos, pareja o familia, ya sea en un día especial o para sorprender en una semana cualquiera.
Primer paso
Comienza triturando las galletas, puedes hacerlo de forma manual o en la licuadora. Una vez que estén listas las galletas, colócalas en un tazón y agrega la mantequilla ya derretida, luego revuelve para que se integre bien.
Ahora coloca un trozo de papel mantequilla o para hornear en la base del molde, después ubica la segunda parte de este utensilio y presiona para ajustarlo bien. Corta el papel sobrante y agrégale toda la masa de galletas.
Para distribuir las galletas y que te quede una capa uniforme, puedes ayudarte con una espátula o con un vaso que tenga la base lisa. Después tendrás que llevar el molde al refrigerador o nevera para continuar con lo demás.
Segundo paso
Agrega a un tazón las barras de queso crema a temperatura ambiente, así que sácalas del refrigerador antes de empezar con la preparación del cheesecake. Tendrás que batir o suavizar el queso, cuando lo tengas listo añade la crema de cacahuate, azúcar, media crema, mazapanes en trozos y finalmente la cucharadita de esencia de vainilla.
A medida que vayas colocando los ingredientes en el tazón del queso, debes ir mezclando con la batidora para que cada uno de los productos se incorpore bien. Después saca el molde con las galletas de la nevera y añade la masa.
Tercer paso
Empareja la mezcla o masa que acabas de verter con una espátula, luego lleva al refrigerador por 6 horas, aunque lo mejor es dejarlo durante toda la noche. Pasado ese tiempo podrás desmoldar el cheesecake con mucho cuidado.
Para ello, introduce un cuchillo liso o una espátula, luego muévelo por los bordes para ayudar a despegarlo y que sea más fácil desmoldar. Por último, decora de acuerdo con tus gustos, por ejemplo, una opción sería colocar un poco de crema batida por el alrededor (usando una manga pastelera), agregar caramelo y espolvorear mazapán.
Otras opciones
También podrías dejarlo simple, así como sale de la nevera o refrigerador una vez que tenga forma, es especial si no quieres excederte con el dulce. De nuevo, te recordamos que todo dependerá de lo que te guste o tengas en casa.
Otra opción es usar un poco de fruta o la salsa que te encante, puede ser casera y que se complemente bien con la receta. De hecho, una de las combinaciones para cheesecake más comunes es con salsa de arándanos por encima.