Muchas películas de hoy en día son inspiradas en hechos reales, pues, muestran la historia de cada una de ciertos sucesos que conmocionaron al mundo o a distintas partes del mismo.
Hoy, en esta nota, te estaremos hablando sobre una historia de la vida real, se trata de la tragedia que inspiro la película ‘No limit” (Sin aliento) de Netflix, ¡Alerta Spoilers!
¿De qué se trata “No limit”?
“No limit” o “Sin aliento” es una película francesa que Netflix agregó a su catálogo este 2022 para que sus usuarios disfrutaran de una trágica historia basada en hechos reales.
La historia sigue a ‘Roxana Aubrey’ quien decide dejar sus estudios e irse al sur de Francia para realizar un curso intensivo de buceo libre. Entre amor, pasión y aventuras que vive ella junto con su instructor, (de quien se enamora perdidamente) Roxana comienza a desafiar sus límites, sin saber que una de estas ocasiones perdería la vida.
El filme es dirigido por David M. Rosenthal y, desde su estreno en septiembre de este año, se ha posicionado como una de las películas más vistas en distintos países del mundo en la plataforma streaming Netflix.
“No limit”, la verdadera historia detrás de ella
Al final de la película, se ve como aparece un homenaje a una mujer, y es aquí en donde se entiende que la cinta está inspirada en una historia real, ¿cuál fue esta? Y ¿cómo sucedieron los hechos? A continuación, te lo contamos.
La mujer que tuvo este trágico final fue Audrey Mestre, una estudiante de Biología marina en La Paz, México. Por sus estudios, desde la corta edad de 13 años, la mexicana se adentró en el buceo, y cuando creció, así como se muestra en la película, conoció al campeón de buceo, Francisco Ferreras, de nacionalidad cubana.
Como en toda historia, se necesita un romance, y esto fue lo que realmente existió entre ambos, pues se enamoraron mientras él la entrenaba para que fuera profesional y pudiera participar en distintas competencias de este deporte.
Muy enamorados, se mudaron a Miami, Florida, y contrajeron matrimonio en el año 1999 en Fort Lauderdale.
Después de entrenar mucho, Audrey se convirtió en una de las mejores buceadoras, llegando a romper el récord mundial de buceo libre al descender 426.51 pies en el 2001.
El momento de la tragedia
Un año después de haber sido reconocida como la mejor buceadora tras romper el record mundial y superar a los más talentosos del campo, alguien más superó este record y Audrey Mestre decidió que recuperaría esta corona, así pues, se entrenó para bajar, esta vez, más de 524.93 pies.
El importante día llegó y Mestre estaba más que preparada, sin embargo, ese 19 de octubre de 2002, el clima cambió drásticamente, colocando en riesgo el descenso de la buceadora, que, según lo planeado, debía tener una duración de 3 minutos máximo.
Sin importar las condiciones climáticas, Audrey estaba dispuesta a romper de nuevo el record y recuperar su corona y reputación como la mejor de las mejores en el buceo libre, por lo que, decidió continuar con su buceo a pesar del peligro que este tenía.
Para felicidad de muchos, ella logró alcanzar la marca de 561 pies, que son 171 metros, mientras todos los presentes celebraban, no esperaban que una tragedia estaba a punto de pasar.
Audrey estaba tardando mucho en volver a la superficie, lo que puso en alarma a todos. Resultó que el cilindro de aire que ella iba a usar para subir de nuevo tuvo un problema y no funcionó como esperaban, además, la fuerte corriente y las condiciones climáticas ocasionaron que su ascenso fuera más lento de lo habitual.
Lastimosamente, una vez su esposo y otro buzo se sumergieron para rescatarla, ya habían pasado 9 minutos y, Audrey Mestre falleció a sus 28 años de edad.
Las especulaciones de su muerte
Desde que se dio conocer el trágico hecho, comenzaron las especulaciones que aseguraban que el principal sospechoso de la muerte de Audrey Mestre fue su esposo.
Se cuenta que él fue la última persona en revisar el cilindro de Audrey, por lo que no debió de haber ninguna falla. Aunque él mantuvo su versión como un accidente, uno de los integrantes del equipo de ese día, afirmó que la pareja estaba pasando por un mal momento y, posiblemente contemplaban el divorcio.
A pesar de esto, al final se declaró que la muerte de Mestre fue un accidente.