No hay nada más tortuoso que despertar en la mañana y descubrir que tu hogar es un campo de batalla que debes organizar a contra reloj. Pues tener una casa ordenada la mayor parte del día parece ser, a veces, una misión imposible. Pero a partir de ahora podrás lograrlo, pues hemos estructurado para ti una lista simple de 10 hábitos sencillos, que te permitirán tener tu hogar ordenado todo el tiempo.
Adiós desorden, hola tranquilidad
Encontrarse con el Triángulo de las Bermudas tras cruzar el umbral de casa es demasiado frustrante para algunos. Pues entre niños, mascotas y convivencias poco equilibradas, una tarea que debería ser simple desde un principio, se puede convertir en un punto de giro brusco, camino a la discusión y la apatía, Incluso, a la auto-recriminación. Pero lo cierto es que es normal enfrentar este escenario de descontrol algunas veces.
Por esto es importante que sepas, antes de conocer nuestra lista de hábitos para mantener tu hogar siempre ordenado, que enfrentarse a una casa desordenada, o hecha un caos, en ocasiones, es totalmente valido. Pues no es justo que vivas solo para limpiar. Ahora bien, aclarado esto te aseguramos que existen 10 hábitos simples que puedes incorporar a tu vida sin mayor presión, ya que no gastarás mucho tiempo en cada sencilla actividad. Y sí podrás notar un cambio real en tu hogar. Así que toma lápiz y papel, que aquí vamos.
Una cama ordenada será un buen inicio
Hacer la cama en la mañana es una tarea simple que mejorará 100% el aspecto de tu habitación y no te tomará más de 5 minutos. Por ello, haz tu cama cada día y crea un nuevo hábito en tu vida.
Un lugar para cada cosa, cada cosa en su lugar
Este juego de palabras te facilitará la vida. Pues antes de tomar cartas en el asunto y comenzar a ordenar tu hogar, es primordial asignarle un espacio determinado a cada objeto y darlo a conocer por todas las personas que comparten el espacio contigo. Para que mantenga la misma regla: un lugar para cada cosa, cada cosa en su lugar.
Una acción más después de cenar
Ya sea tras el desayuno, el almuerzo o la cena, lava los platos y trastes que hayas utilizado después de comer. Pues, aunque suene tentador, dejarlos en la pileta hasta que te sientas más dispuesto para lavarlos solo dilatará el asunto y pasadas las horas sentirás que la tarea es más y más molesta. Solo necesitas un poco de actitud y voluntad para ir de la mesa al lavaplatos.
La basura en la basura
No esperas a que tu tarro de basura esté hasta el tope para sacarla del estudio, baño habitación o cocina. Ya que sin duda la tapa levantada, porque no cabe una aguja más en el cesto, da una impresión de desorden y ni que hablar del irremediable olor. Mejor lleva la basura a la basura.
Reinicia el chip
Quizás creas que una superficie plana es la mejor oportunidad para dejar lo que llevas en las manos o almacenar libros, revistas y juguetes. Pero es importante entender que una mesa es para cenar y compartir comidas, la encimera de la cocina no es una repisa de libros y bolsos y, así mismo, repetir la misma regla con todas las superficies en tu hogar.
Todo se verá mucho más ordenado si cada cosa y espacio conserva su utilidad.
Una mancha pequeña se puede volver un gran problema
Si en la mañana tu hijo, tú o tu perro, bebiendo agua, han hecho un pequeño desastre regando líquido por el suelo y no se ha limpiado en el momento, tras unas horas el desastre será mayor y mucho más notable. Lo mismo sucede con las mesas y el comedor. Así que si algo se ensucia, pasa una toalla adecuada y limpia el pequeño desorden antes de que se acumule y todo sea mucho más complicado.
Si ya lo usaste, ya lo guardaste
Es esencial que las cosas que uses en el transcurso natural de tu día tengan un lugar, pero más importante aún, es que aquellas cosas vuelvan al sitio o lugar que les pertenece. Si ya lo usaste, déjalo en el espacio que haz destinado para él, pues con este pequeño acto, ya estarás ordenando.
Invierte en el aseo de tu hogar
Si eres de los que les preocupa en mayor medida el orden y aseo de tu hogar, probablemente ya sepas que una escoba y un trapero no son suficientes para mantener tu casa con un aire de frescura constante. Ten aromatizantes, desinfectantes, limpiadores y demás productos para facilitarte la limpieza. Si puedes económicamente permitírtelo, adquiere electrodomésticos que te permitan invertir menos tiempo en los quehaceres del hogar, como una secadora, una maquina lavadora y un lavavajillas.
Dedica un día de tu mes a la limpieza general
Planea al menos un día de tu calendario mensual en el que deberás ocuparte de la limpieza y el orden general de tu hogar. Dedica ese día a ordenar de nuevo y asignar un espacio diferente a algunas cosas de tu hogar. Así sentirás, durante el resto del mes, que tu casa está más ordenada de lo habitual.
Si no vives solo, no te sientas solo
Es usual que en el hogar exista solo una persona encargada de las tareas del hogar. Pero si no vives solo, no te sientas solo en algo que es importante e incluye a cada miembro de tu hogar. Es importante que los hábitos sean parte de la cotidianidad de todos, no solo tuya. De este modo, las cosas serán justas y sencillas para todos.
Cambia los hábitos en tu vida y siente que tu hogar no es una trinchera de guerra cada que termina el día. Tu misma te lo agradecerás cada mañana.