Muchas veces solamente nos preocupamos por nuestra salud física, cuando sentimos dolor en alguna parte de nuestro cuerpo, buscamos ayuda médica para atender lo que podría ser una emergencia de salud y basta con algunos medicamentos para calmar el dolor o tratamientos importantes si se trata de alguna enfermedad que lo requiera, pero descuidamos nuestra salud mental, que también es muy importante, tan prioritario como la salud física.
Una buena salud mental, nos puede garantizar una vida tranquila, sana, con bienestar. Cuando la salud mental se afecta, podemos llegar a cometer acciones o decir palabras que no tienen vuelta de hoja y existen algunos signos de alarma, a los que podemos poner mucha atención. En pocas palabras, los seres humanos somos un enlace entre el cuerpo y mente y así como te preocupas por hacer actividad física, implementar hábitos saludables para el bienestar de tu cuerpo o asistir a citas de odontología, ginecología y otras especialidades, también es importante que implementes algunos hábitos para tu salud mental.
¿A qué se refiere el concepto de salud mental?
Algunas personas ni siquiera tienen claro el concepto de la salud mental y es muy amplio. Es importante abordarlo, pero no te sientas frustrada o juzgada si no tienes un concepto claro, y tampoco avergonzada o intimidada si padeces algún síntoma de que tu salud mental no esté bien. Simplemente no hemos recibido la educación y orientación necesaria para ello.
La salud mental, se conoce como un estado del ser humano que se expresa por medio de la interacción y el comportamiento para poder relacionarnos con sujetos colectivos e individuales, implementando recursos emocionales, mentales y cognitivos para desarrollar las actividades de la vida diaria. Es decir que de nuestra salud mental depende poder desarrollarnos y relacionarnos en medio de nuestra sociedad. La salud mental incluye la correcta toma de decisiones y cómo manejamos los momentos difíciles de la vida o cómo afrontamos los altibajos que se nos presenten, de la misma manera cómo podríamos actuar o pensar frente a situaciones positivas. Pero para que puedas aportar a tu salud mental, te queremos dejar algunos consejos que son muy importantes.
1- Construye relaciones sanas y amigables
No hay nada peor que generar mal ambiente ya sea en tu casa, en el trabajo, en el gimnasio o a donde quiera que vayas. Tener relaciones tóxicas o de constante conflicto, te hará sentir incomoda o te hará pensar y repensar todo el tiempo en esta situación y esto no está bien para tu mente. Trata siempre de construir relaciones que sean duraderas y que por el contrario, te rodees de personas que te aporten de manera positiva en tu vida y te ayuden a crecer como persona y te traigan felicidad. Si construyes relaciones que se basan en en una comunicación clara, sana y fluida, te va ayudar a vivir en armonía y empatía.
2- Acude a citas para tu salud mental en general
Así como solicitas citas de medicina general, odontología, también hazlo para citas de psicología, trabajo social y psiquiatría si es necesario. El hecho de que asistamos a citas de estas especialidades, no quiere decir que seamos locas maniáticas, sino que simplemente somos seres humanos y así como necesitamos un ginecólogo o un médico general, también necesitamos un psicólogo, es lo más normal en la vida humana. Así que deja de acomplejarte y realiza chequeos para tu bienestar mental. Ve a terapias y veras la ayuda en tu vida, las mujeres siempre estamos en ajetreos diarios, con una que otra situación de estrés.
3- Dile si al yoga y la meditación
Estas son técnicas usadas de hace muchos siglos para relajar el cuerpo y buscar plenitud y bienestar. Inhala y exhala, estas prácticas de respiración son un proceso qué beneficia el estado anímico, relaja los nervios, elimina tensiones aliviando estados de ansiedad.
4- Dale manejo a tus emociones
Antes decir alguna palabra, tomar una decisión o realizar algún acto, respira profundo, busca refugio y calma dentro de tu corazón, para que actúes de manera asertiva y puedas expresar tus emociones de la mejor manera, sin herir a nadie y explotar. Esto no solamente te afectará a ti o a las personas a tu alrededor, sino que vas destruir las buenas relaciones que tengas. La sanidad emocional va a ayudarle a tu alma y espíritu.
5- Descansa lo suficiente
Un cuerpo que descansa lo suficiente, tendrá la energía necesaria para realizar todas las actividades. Lo recomendable es descansar entre 7 y 8 horas diarias, para que tu cuerpo se recomponga, las células se regeneren y te liberes de todo el cansancio. Esto no solamente te ayuda a reducir problemas psicológicos, sino también físicos.
6- Proyecta en tu mente pensamientos positivos
Si tu mente gestiona pensamientos positivos, te ayuda a mantener una estabilidad emocional para encontrar tranquilidad y plenitud. No te dejes llevar por la desesperación y por pensamientos negativos o preocupaciones, más bien activa la energía positiva, que además puedes contagiar a los demás.
7- Sé feliz y diviértete
No hay nada más reparador que la felicidad y la diversión. Busca realizar actividades placenteras, que te desconecten y te relajen. Dedícate tiempo en compañía de tus amigos o familiares y así vas a lograr un mejor estado anímico, lleno de alegría y esplendor, de hecho en estos momentos es donde puedes tomar las mejores decisiones.