La almohada. Es una pieza rellena de materiales blandos, que se utiliza normalmente para colocar la cabeza. La almohada debe ajustarse a la morfología de cada individuo; Con la intención de evitar lesiones a nivel cervical y de hombros, afirman los expertos en fisioterapia del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España.
Con la intensión de evitar lesiones cervicales y de hombros. Se aconseja que tenga en cuenta, la postura corporal que adopta la persona al momento de dormir. Pues, es característica importante a considerar para elegir y acondicionar tu almohada; En cuanto, a tamaño, altura y dureza; Asimismo, longitud de la almohada sea mínima, la misma distancia que hay entre los hombros; Expresan, los fisioterapeutas.
Las almohadas. Son una herramienta útil a la hora del descanso; Sin embargo, estas, son foco de infección y bacterias, que pueden ser perjudiciales para la salud. Afectando la parte osteomuscular, la piel y el cabello. A continuación, hablaremos en detalle de las razones por las cuales la almohada puede afectar tu salud.
Razones por las cuales tu almohada puede convertirse en una pesadilla
Siendo la función principal de la almohada. Garantizar, la correcta alineación de cabeza, cuello y tronco; Para ello, la altura y dureza correcta de la almohada, evita que la columna se desalinee.
No elegir la adecuada para ti
La primera razón por la cual la almohada te enferma es. Que no elegir la correcta; Puede, desarrollar patologías osteomusculares, en cabeza, cuello, espalda y hombros. Desde un simple dolor de espalda, hasta, una lesión cervical. Además, la mala postura a la hora de dormir, trae tensión en la región lumbar y en los discos cervicales. Es importante, revisar la vida útil de estos objetos; Puede, que hayas elegido la almohada correcta, pero con el tiempo se va deteriorando y debe cambiarse.
Puede convertirse en foco de bacterias
Otro factor, por el cual las almohadas pueden afectar tu salud de forma negativa. Se debe, a causa de bacterias, hongos y microorganismos; Dado que, las almohadas son objetos personales, de uso diario, que en muchas ocasiones descuidamos y olvidamos limpiarlas, desinfectarlas y ventilarlas.
No basta, solo lavarlas y remover la suciedad; Las almohadas guardan ácaros, microbios y bacterias que deben ser eliminados con un buen proceso de desinfección; A fin de, evitar infecciones cutáneas, aparición de granos, y empeoramiento problemas de la piel, como el acné o dermatitis y problemas en el cuero cabelludo, infecciones o caspa.
Recuerda que; Durante la noche sudamos y este sudor queda impregnado en las almohadas, favoreciendo la aparición de bacterias. La falta de ventilación y luz; También, influye en la proliferación de hongos. Se hace recomendable, espacios con luz y ventilación.
Conclusión
A modo de conclusión, podemos determinar que; Las almohadas son herramientas, esenciales para el descanso e higiene postural a la hora del cuerpo estar en reposo, pero, requiere elegirse de forma correcta; Asimismo, necesitan cuidado especial, desinfección, limpieza y cambio, cuando cumpla su tiempo de utilidad.