Aunque las arrugas son parte del proceso de envejecimiento natural, existen algunos hábitos sencillos que puedes adoptar desde joven para retrasar su aparición. Los expertos recomiendan que alrededor de los 25 años es donde debemos preocuparnos más por cuidar la piel, pero si estás lejos de esa edad, esto es aún mejor, ya que siempre es bueno mantener hábitos saludables para que tu piel se encuentre en las mejores condiciones y siga así con el paso del tiempo. En realidad, no se trata de nada del otro mundo, cuidar de tu rostro es más sencillo de lo que parece.
Hábitos para prevenir las arrugas
1-Aplica protector solar todos los días
Este debe ser uno de los pasos más importante dentro de cualquier rutina de cuidado para la piel. No solo se trata de un producto exclusivo para la playa, debes usarlo a diario y si es posible, repetir su aplicación a lo largo del día.
De esta manera reduces el riesgo de padecer cáncer de piel, arrugas y manchas oscuras. Por suerte, en el mercado puedes encontrar excelentes opciones para el rostro, ya que esta zona es más sensible que el resto de tu cuerpo. Al elegir los productos adecuados, es menos probable que obstruya los poros, provoque brotes o irrite la piel.
2-Aplica cremas para el contorno de ojos
La piel que se encuentra alrededor de los ojos se caracteriza por ser más delicada y propensa a la resequedad, por lo que siempre es bueno utilizar una crema especial para que esta parte del rostro se vea bien.
Este es un paso en la rutina que te permite combatir la aparición de líneas finas y ojeras; también hidrata, ayuda a que el maquillaje quede mejor y dure más. Lo ideal es iniciar a los 25, pero todo dependerá de tus necesidades.
3-Incluye un masaje facial
Dedicar tiempo a masajear tu rostro puede traer varios beneficios. Por ejemplo, reducir la hinchazón, aumentar la producción de colágeno y permitir que tu rostro se vea saludable. Para ello, puedes usar tus manos o un rodillo, solo asegúrate de usar una pequeña cantidad de un producto para el cuidado de la piel, ya sea un suero o aceite.
Así potenciarás todos los beneficios que se le atribuyen, además de agregar lubricación para que sea más sencillo realizarlo en casa y evitar algún tipo de irritación. Cuando lo hagas, intenta hacer una presión suave, pero firme.
4-Evita frotar los ojos
Tratar con brusquedad a esta zona puede influir para que las líneas finas y arrugas aparezcan con mayor rapidez. No olvides que este tipo de piel es muy delicada y debes tratarla con amor, así que la recomendación es que uses el dedo anular cada vez que vayas a aplicar un producto, por lo que también debes tener cuidado al maquillarte.
5-Bebe suficiente agua
Los cuidados no solo se relacionan con la parte externa, es importante hidratar el cuerpo desde el interior. Cuando bebes agua, la piel mantiene la humedad y elasticidad, evitando que se formen las arrugas. Pero los beneficios no terminan, tomar suficiente agua maximiza tu rendimiento, evita los dolores de cabeza y ayuda con el estreñimiento.
6-Consume alimentos ricos en antioxidantes
Si deseas gozar de buena salud y que esto se vea reflejado en tu piel, cabello y uñas, debes cuidar de la dieta. Los antioxidantes son compuestos que combaten los radicales libres, causantes de enfermedades y problemas en la piel cuando sus niveles son altos. Puedes encontrarlos en los arándanos, fresas, frambuesas, espinacas y col rizada.
7-Reduce los niveles de estrés
El estrés constante también puede tener un impacto negativo en tu salud. Se cree que el estrés genera cambios en las proteínas de la piel y reduce la elasticidad, lo que podría contribuir a la aparición de arrugas. Además, el sentirse estresado, podría provocar que el ceño se frunce en repetidas ocasiones, aumentando la probabilidad de arrugas.
Otros de los problemas relacionados con el estrés son: acné, bolsas debajo de los ojos, piel seca, enrojecimiento, sarpullido, canas y pérdida de cabello. Para lidiar con el estrés, intentar programar actividades que sean relajantes.
8-Cambia las posiciones para dormir
Todos tenemos esa posición favorita para dormir. Una de las más comunes es boca abajo o de lado, sin embargo, dejar tu cara contra la almohada todo el tiempo, puede causar fricción y favorecer la aparición de líneas finas. Aunque no hay nada más placentero que dormir como te gusta, lo ideal sería intentar variar las posiciones.
Otro dato importante es que, al dejar por mucho tiempo el rostro sobre las almohadas o peluches, es más fácil que aparezcan granos, ya que puede acumularse polvo, suciedad y gérmenes en estos objetos para la cama.