Durante muchas décadas los países asiáticos, como, Japón y China, atesoraban el té verde como infusión medicinal, siendo una de las bebidas más antiguas del mundo. Se dice que fue descubierta en China por un emperador hace 400 años. La India, Turquía y otros países, han incorporado dentro de su alimentación el té verde. Actualmente, es consumido por muchas personas al rededor del mundo; En los últimos años se ha incrementado su consumo Pues, dentro de sus componentes hay grandes propiedades, para la salud.
El té verde y el té negro vienen de la misma planta Camellia Sinensis L. Originaria del sur de China y del norte de la India. Es un arbusto perenne, con muchas ramificaciones y puede llegar alcanzar hasta 10 metros de altura, sus hojas, son de color verde oscuro.
Propiedades y principios activos
Dentro de sus principales bioactivos; Encontramos dos bases, xánticas y polifenoles. Los activos xánticos, son en mayoría cafeína, teofilina, teobromina, xantina y adenina; Por su parte, los polifenoles, más representativos son los flavonoides, catecoles, taninos, catequícos y ácidos fenólicos. Los polifenoles. Le confieren al té verde bondades hipolipemiantes, al consumirlo regularmente mejora el perfil lípido en la sangre; Es decir, reduce los niveles de colesterol.
Estudios epidemiológicos, sustentan que las personas que consumen esta infusión, tienen menor incidencia en enfermedades cardiovasculares. Igualmente, reduce el riesgo de diferentes tipos de cáncer. También, se le atribuye efectos angioprotector, antiagregante, plaquetario y antiinflamatorio y un poderoso antioxidante, que retrasa el envejecimiento precoz y contrarresta la acción de los radicales libres.
También, contiene micronutrientes minerales, sodio, hierro, fósforo y potasio, vitaminas C y del grupo B, B1 y B2, B3 y B6, que aportan salud y bienestar al cuerpo. Gracias a la L- teanina, el té verde funciona como relajante natural, lo que es de gran ayuda en momentos de tensión, estrés o crisis.
Es importante decir que el té verde, no contiene hidratos de carbono, ni azucares, ni grasas; Sin embargo, en el mercado encontramos bebidas a base de té verde que si contiene, edulcorantes y azúcar, que si aportan calorías.
Funciona para adelgazar
Estudios en animales con obesidad exógena, demuestran que, el consumo de té verde, disminuye la masa de tejido adiposo, evitando la afección de hígado graso.
El té verde controla tus ganas de ingerir alimentos. Esto ocurre por causa de la leptina que brinda mayor saciedad. Asimismo, tiene propiedades diuréticas, por lo cual se considera un remedio efectivo para combatir la retención de líquidos; A su vez, desinflama el estómago. Es un excelente acelerador del metabolismo y termogénico, lo que hace que queme y elimine grasa de forma natural, al aumentar la temperatura corporal.
Infusión de té verde
La forma tradicional de consumir el té verde es en infusión. Al consumirla no solo nos beneficiamos de sus bondades, sino; También, nos reconforta y nos da calor en días de frío y lluvia. Para preparar esta bebida que aporta muchos beneficios a la salud y que nos ayuda a bajar de peso, solo necesitamos lo siguiente:
Ingredientes
- Agua
- 4 Hojas de té verde o (Una bolsa, de las del super)
- Miel (opcional)
En una olleta ponemos a hervir medio vaso de agua, a fuego medio; Aparte, en un pocillo ponemos 3 hojas de té verde o una bolsa de las que encontramos en el supermercado; seguidamente vertimos el agua y si queremos amenizar un poco y contrarrestar el sabor del té, darle un toque dulce con unas gotas de miel, tapamos con un plato y dejamos reposar 5 minutos. Consumir preferiblemente en las noches y en la mañana.
Esta preparación puede variar, al agregarle otros ingredientes como limón, jengibre, menta, entre otros, que; Además, de cambiar el sabor, ayudan a potencializar el efecto quema grasa y acelerador del metabolismo.