Una de las tareas del hogar es la limpieza de los baños, pero hoy vamos a hablar exactamente de la tapa de tu inodoro. Notamos que con el tiempo esta se va poniendo amarillenta y ese aspecto no es el más favorable, mucho menos si vamos a recibir alguna visita especial, ahora bien, podemos usar diferentes productos como quitamanchas y observar que el color se va desgastando y va perdiendo su apariencia original.
Hay diferentes factores que hacen que los elementos de nuestro casa se empiecen a deteriorar y vayan teniendo una imagen de vejez o mal cuidado. En el caso de los baños, la humedad, el sol y otros factores ambientales los pueden perjudicar y maltratar.
Pero tranquila, todo tiene solución, anota los siguientes trucos que te vamos a compartir para que ya no sufras más, puedes usar algunos productos que son comunes y fáciles de conseguir en el supermercado. Procura hacer una limpieza, mínimo de dos veces por semana, para potenciar el efecto en la tapa del inodoro.
1-Lejía y agua oxigenada
Usa la lejía corriente y sin detergente, puedes comprar la más económica y aplicarle agua oxigenada que, además, te ayudará a eliminar todas las bacterias que allí se encuentran, prepara esta mezcla para los pisos, las superficies y verás cómo se van viendo los resultados a medida que pase el tiempo.
Para la preparación llena medio vaso con lejía y ponla a calentar en tu microondas durante 45 segundos, agrega unos cuantos chorros de agua oxigenada. Humedece en la mezcla una esponja y aplícala sobre toda la tapa del inodoro, trata de hacerlo de manera uniforme para que no falte ningún espacio, deja que actúe durante 45 minutos y vuelve a limpiar nuevamente.
2-Ácido clorhídrico
Para usar este remedio debemos tener mucho cuidado y estar atentas, ya que al ser producto químico puede provocar alteraciones en nuestra piel si no le damos un correcto manejo. Usa unos guantes gruesos que protejan muy bien tus manos, una mascarilla para tu rostro y ojos, primordialmente. Rebájalo con agua y no lo dejes actuar más de 8 minutos.
3-Lejía de ropa blanqueante
La lejía es excelente para lavar la ropa, remover las manchas, eliminar hongos, bacterias y también para blanquear la tapa del inodoro, es un remedio sencillo y útil. Solo debes verterla en un recipiente con un poco de agua y mezclar. Toma una esponja y limpia toda la tapa, déjala que actúe por unos 20 minutos y repite dos o tres veces hasta que notes que ha quedado blanca como deseas.
4-Rutina de limpieza
Cuando vayas a limpiar la taza de tu inodoro, comienza por desbaratarla para que quede sola. Puedes notar que debajo de los tornillos que la aseguran se acumulan bacterias y mugre que puedes limpiar.
Consigue una esponja de brillo y bicarbonato de sodio, junto al agua oxigenada y un poco de agua. Ubica en el lavadero la tapa y ponle el agua oxigenada para bañarla; espárcela muy bien por todos sus lados, envuelve la tapa con un plástico y déjala reposar por un tiempo, aproximadamente de cuatro horas. Ten en cuenta que el plástico que vas a manejar debe ser transparente para no manchar la tapa.
Puedes usar un secador de cabello para darle calor a la tapa, una vez que esté bien forrada con el plástico, le dará mayor potencia a la limpieza. Haz esta operación durante 4 o 5 minutos. El calor activará el agua oxigenada y ayudará a blanquear de manera más rápida. Pasa una esponja de brillo para que puedas retirar todo el producto y enjuaga muy bien cada parte de la tapa y listo. Mira los increíbles resultados que se obtienen de una rutina de limpieza tan fácil, económica y sencilla.
Cuidados a la hora de limpiar
Nunca olvides que para cualquier tipo de actividad que implique usar químicos o productos fuertes debes cuidar y proteger tu piel, en especial cuando uses ácidos porque pueden causarte heridas graves. Lo aconsejable es que implementes tapabocas, unas gafas transparentes, guantes gruesos, un delantal y que recojas tu cabello.
Si sientes que algún producto cayó sobre tus ojos abandona inmediatamente la actividad y, si es necesario, acude al médico. Si presentas ardor en las manos o en la vista, quiere decir que los productos son demasiados fuertes y que eres sensible ante estos. Ten siempre agua a la mano si llegas a presentar cualquier situación de emergencia. Siempre cuida y protege tus ojos y rostro.