Si estás pensando en cultivar la planta aromática lavanda en tu hogar, te daremos unos consejos que debes considerar antes de sembrarla.
Esta planta puede usarse para dormir, para los gases o contra el mal olor, se puede usar como aceite esencial o su flor seca para infusiones. Gracias a sus composiciones de aceites, esta flor se vuelve útil para sedar, como antiinflamatoria, digestiva, cicatrizante, antibacteriana, antiséptica, entre otros beneficios.
1- Escoge muy bien el lugar
La lavanda necesita de un lugar muy bien iluminado ya que es una planta mediterránea, es decir, pelecha en lugares cálidos y con la ayuda del sol.
Busca un lugar en tu hogar donde la planta pueda recibir un promedio de 8 horas de sol y que también esté protegida de los vientos invernales.
*Considera sembrarla junto a una roca, ya que esta le brindará protección y calor extra*
2- Drenaje adecuado
La lavanda no crece en la humedad, así que es importante que el suelo tenga un drenaje adecuado.
La tierra debe ser ligera, esponjosa y aireada.
Mezcla la tierra con un poco de arena de construcción para mejorar el drenaje.
3- Cava un hoyo en el que quepan las raíces
Usa una pala para cavar un hoyo en el lugar previamente elegido, debe ser tan grande como sea necesario para contener las raíces.
Si sembrarás es una maceta elige uno lo suficientemente grande para meter las raíces y que sobre un poquito al rededor.
4- Prepara el suelo
Debes preparar el suelo antes de sembrar la lavanda para que pueda crecer en unas mejores condiciones añadiendo dos montones de canto rodado, media taza de caliza, estiércol y cal.
Integra todo bien y cúbrelo con tierra
5- Riega la lavanda en la maceta antes de plantarla
Debes regalar la lavanda en la maceta sin la tierra por lo menos una hora antes de plantarla, esto para que las raíces estén completamente hidratadas pero no húmedas
6- Planta
Finalmente llegamos al punto anhelado, plantar la lavanda. Todos quisiéramos pasar inmediatamente a este punto; sin embargo, es importante que tomes nota y seas bien cuidadoso con los puntos anteriores.
De allí dependerá este punto, el cómo crecerá nuestra lavanda.
Coloca la planta en el lugar previamente organizado para ella y añade una capa ligera de tierra por encima de la mezcla que ya habíamos hecho.
Las raíces no deben entrar en contacto directo con la mezcla. Rellena el espacio sobrante del rededor y encima de las raíces con tierra. Aplana el terreno que rodea la base del tallo.
Plus
Aquí te van unos extras para lo que continúa, el cuidado de tu planta.
- La lavanda no necesita de muchos cuidados, solo debes echarle fertilizante una vez al año. Una mezcla de estiércol y cal en la parte superior. Para el verano nútrela con emulsión de pescado o extracto de alga.
- Riégala con moderación porque la humedad y la lavanda no se llevan bien, así que asegúrate que entre cada riego la tierra quede seca, no deshidratada, seca, esto con la ayuda del punto dos, el drenaje adecuado.
- Pódala una vez al año
- Recoge las flores y con ellas da una gran fragancia a tu hogar dejándolas secar (esto debe ser una gran cantidad de pétalos).
De lo que sí puedes estar seguro es que esta planta le dará luz, colores y mucha fragancia a tu hogar. Ten los cuidados necesarios y verás cómo valdrá la pena.
Además esta planta representa calma y tranquilidad, por lo que permite que se desarrollen ambientes de paz en su presencia. Así que esta es una de las mejores opciones y decisiones que puedes tomar para tener en tu hogar.