La planta teléfono o poto es muy popular para el uso interior, puedes encontrarla fácilmente como un elemento decorativo. Por ejemplo, en oficinas, casas, centros comerciales y otros lugares públicos. Esto es gracias a que su aspecto es atractivo, además es resistente y requiere pocos cuidados. Puede alcanzar varios metros de altura si le das el soporte adecuado, así como los mejores resultados se obtienen al proporcionarles luz media indirecta.
Aunque esta planta tolera una luminosidad intensa, los largos periodos de luz solar directa termina quemándola. Por lo general, solo necesitará riego cuando la tierra esté seca al tacto, también es posible echarle un fertilizante líquido en la primavera y se debe replantar cada dos años. En cuanto a su reproducción, esta se realiza de forma sencilla por esquejes. Así que, si quieres tener más plantas o la que ya tienes está muy grande, sigue estos pasos.
Cómo propagar una planta teléfono o photo
No olvides que estas plantas se han catalogado como tóxicas para gatos y perros, por la presencia de oxalatos cálcicos solubles. Por ello es importante tomar las precauciones necesarias. Entre los síntomas por su consumo está la irritación oral, vómitos y dificulta en la deglución (paso de los alimentos de la boca hacia el estómago).
Dicho esto, aquí hablaremos sobre como podar la planta, hacer los esquejes, enraizar los esquejes en agua y luego cómo plantarlos en la maceta. Todo lo que necesitarás será un poco de tu tiempo, al igual que algunos vasos pequeños con agua, entre otras cosas sencillas que se mencionan a continuación.
Materiales
- Vasos llenos de agua para guardar los esquejes.
- Tierra para macetas de interior o multiusos para plantar.
- Una maceta para plantar.
- Unas tijeras afiladas o cuchillo.
Instrucciones
- Primer paso: si tu planta se está descontrolando es momento de hacer un corte. Así que decide que tan largas te gustaría que fueran las enredaderas, luego corta directamente debajo del nodo de la hoja más baja que quieres dejar. Ahora desenreda las enredaderas y colócalas individuales para hacer unos esquejes.
- Segundo paso: corta a lo largo del tallo para crear esquejes de hojas individuales. Corta a la derecha y a la izquierda de cada tallo de hoja, dejando un pequeño trozo de vid adherido a la parte inferior. Fíjate en las pequeñas protuberancias marrones, estos se llaman nodos y allí es en donde se formarán las nuevas raíces.
- Tercer paso: llena los vasos con agua y coloca los tallos para que los extremos cortados se encuentren sumergidos. Coloca los esquejes en un lugar cálido y déjalos crecer, pero revisándolos cada dos días. Vacía el agua vieja para poder remplazarla por nueva. Déjalos hasta que tengan varios centímetros de raíces.
Esperar hasta que estén listos para plantar
- Cuarto paso: debes tener en cuenta que entre más tiempo pasen las raíces en el agua, más difícil será cambiar a la tierra, por lo que es mejor plantar algunos esquejes mientras que esperas a los otros. Los esquejes sin raíces pueden permanecer en agua hasta que salgan, aunque algunos se tardan demasiado.
- Quinto paso: llena una maceta hasta alrededor de 2/3 de su capacidad con tierra y empieza a colocar los esquejes por los bordes, agregando más tierra según sea necesario, para mantenerlos en el lugar correcto. Ahora llena el centro de la maceta con esquejes y agrega más tierra de acuerdo a lo que creas necesario.
- Sexto paso: riega de forma lenta y abundante hasta que salga por el fondo de la maceta. Cuando deje de gotear coloca la maceta en el sitio donde desees que viva, después cuídalos como una planta poto común.